La diputada Bárbara Romo Fonseca lamentó que casos de trabajo infantil como el reportado recientemente en el estado de Guanajuato -donde laboraban 15 menores originarios de Guerrero- se sigan presentando en el país, pese a los esfuerzos del Poder Legislativo para erradicar este atropello a los derechos fundamentales de la niñez mexicana.
En este sentido, la legisladora exhortó a las autoridades competentes a incrementar la supervisión en entidades como Baja California, Chihuahua, Sinaloa, Jalisco, Michoacán, Durango y Nayarit, en las cuales hay un total de 2.5 millones de adultos y 300 mil niños jornaleros agrícolas, según la Encuesta Nacional a Jornaleros Migrantes.
Y es que dijo, es urgente identificar, sancionar y erradicar este delito que viola los derechos económicos, sociales, educativos, de salud y culturales de los infantes; ya que nos enfrentamos a un contexto donde únicamente el 10 por ciento de los niños jornaleros asisten a la escuela, sin contar que viven una severa desnutrición y exclusión social.
Romo Fonseca agregó que el caso registrado en territorio guanajuatense se suma al rescate que se dio de mujeres, niños y hombres, de origen indígena, que trabajaban como jornaleros agrícolas en los campos de cosecha de papa en Baja California.
A lo que reiteró, “es una alerta que expone lo mucho que nos falta por trabajar para erradicar esta práctica que sumerge a grupos vulnerables como son los niños en condiciones de insalubridad y precariedad al poner en riesgo su desarrollo físico y bienestar mental”.
Finalmente, la legisladora agregó que si bien el trabajo de la sexagésima segunda Legislatura ha culminado, la responsabilidad por erradicar este problemática va más allá del tiempo y el grupo parlamentario al que se pertenece.
“No sólo es pertinente sino urgente legislar para perfeccionar el marco jurídico, ya que no podemos mantenernos al margen de la explotación que viven algunos niños del país, pues el futuro de una nueva generación se torna incierta”, concluyó.
PARTIDO VERDE ECOLOGISTA DE MÉXICO
